Cuando Ford y Volkswagen anunciaron el establecimiento de un alianza el sector del automóvil se paralizó. En un primer momento pensamos que podría ser un tipo de fusión con el que dominar al resto de fabricantes, pero finalmente no fue así. Su acercamiento tiene más que ver con la necesidad de repartir costes de desarrollo en áreas como la electrificación o conducción autónoma. Por ello, no habrá intercambio de acciones entre ellas.
Los meses sucesivos a este anuncio, supimos que Ford se encargaría de crear el nuevo Volkswagen Amarok. El fabricante alemán, a pesar de su gran tamaño, no es capaz de desarrollar un pick up competitivo. Por su parte, a pesar del lanzamiento del Mustang Mach-E, Ford reconocía su debilidad en cuanto a electrificación. De ahí, que hayan creado un plan de trabajo conjunto que, además de interesante, se torna muy ambicioso.
A pesar de su alianza, Ford y Volkswagen, seguirán compitiendo
Ambos proyectos son la base sobre la que han girado sus conversaciones, pero ahora vemos que no son los únicos. Si echamos un vistazo al timing que han publicado, vemos modelos de los que no habíamos oído nada. Para no liarnos, desgranaremos sus planes en la siguiente lista.
- Ford desarrollará y fabricará un nuevo Ranger. Sobre él, Volkswagen creará la nueva generación del Amarok que, si todo va según lo previsto, llegará al mercado en el año 2022.
- El segmento de los vehículos comerciales quedará de la siguiente forma. La nueva entrega del Volkswagen Caddy, que llegará en 2021, será la base para que Ford lance al mercado el relevo del Tourneo. Más tarde llegará un nuevo Transit que, a su vez, tendrá su réplica en la marca alemana.
- Por último, Ford fabricará un modelo cien por cien eléctrico para Europa. Llegará en 2023 empleando la plataforma Modular Electric Drive o MEB de Volkswagen. Para evitar solapamientos, disfrutará de una estética y puesta a punto dirigida por los ingenieros de la firma americana.
Según las estimaciones que ambas compañías han realizado, su producción conjunta alcanzaría los 8 millones de unidades. Esta cifra no incluiría los más de 600 mil vehículos eléctricos que, cada año, aportaría Ford. A todo ello hay que sumar el acuerdo que firmó Volkswagen con la firma Argo AI. Con ella, dan un paso más para integrar la conducción autónoma en los modelos que ambas firmas vendan en Europa y EEUU.
El nivel de expectación es muy elevado, pues nunca dos constructores de este tipo habían compartido lazos tan estrechos. Su rivalidad estará ahí presente, pero la posibilidad de incrementar (o romper) sus proyectos siempre estará ahí. Habrá que ver cómo reaccionan sus rivales, pues no creemos que Toyota, RAM, General Motors o Mitsubishi les cedan su parte del mercado pick up.
Fuente: Actualidad Motor